En el segundo semestre se estudian las asignaturas relacionadas con el proceso educativo, la cognición y el aprendizaje.

 

 

 

 

 

Transformar la práctica docente es posible, requiere de aprender a desaprender, reaprender y reinventar nuestra labor.  Conocer el cerebro, cómo aprende, qué estrategias estimulan la neuroplasticidad, qué motiva a los estudiantes, es indispensable. La vocación es básica a la hora de enseñar, pero la pasión por lo que haces es invaluable.